Pershing, John Joseph (1860-1948)
General estadounidense, nacido cerca de Laclede (Linn County, Missouri) el 13 de septiembre de 1860 y fallecido en Washington D.C. el 15 de julio de 1948, que mandó el Cuerpo Expedicionario Norteamericano (AEF) durante la Primera Guerra Mundial.
Ingresó en la Academia Militar de West Point en 1882 y, aunque no destacó por su número de promoción, sí demostró cualidades para el liderazgo y la disciplina. En 1886 obtuvo su primer destino en un destacamento de caballería de Nuevo México, donde participó en la campaña contra los apaches, y después mandó un pelotón de exploradores indios durante la sublevación sioux de 1890. En 1891 fue nombrado profesor de Táctica y Ciencia Militar en la Universidad de Nebraska, y en 1897, instructor ayudante de Táctica en West Point, época en la que se hizo célebre entre los alumnos por imponer una férrea disciplina.
En la guerra contra España (1898) tuvo un papel destacado en la campaña de Santiago de Cuba y, tras su finalización, fue destinado a Filipinas, donde permaneció hasta 1903 y tomó parte en varias acciones de guerra en las insurrecciones de los nativos, lo que le valió un rápido ascenso en el escalafón desde capitán hasta general. En 1905 contrajo matrimonio con Helen Warren, hija de un senador, y poco después fue enviado por segunda vez a Filipinas para ocupar el cargo de gobernador militar en las provincias afectadas por una nueva rebelión. En 1916 ascendió a mayor general y fue puesto al mando de una expedición de castigo contra el revolucionario mexicano Pancho Villa, quien había realizado una incursión en territorio estadounidense; pese a no conseguir capturarlo, la celebridad de la campaña aumentó su prestigio.
Con la entrada de Estados Unidos en la Primera Guerra Mundial (abril de 1917) se planteó la necesidad de enviar tropas a Europa, el American Expedicionary Force o Cuerpo Expedicionario Norteamericano, y Pershing fue elegido para comandarlas. Además de las dificultades de reclutamiento, entrenamiento y transporte de un ejército de tales proporciones (unos 500.000 hombres), tuvo que hacer frente a la pretensión de Gran Bretaña y Francia de incluir a las tropas americanas dentro de sus propias divisiones, aunque sí fue partidario de un mando único aliado. En septiembre de 1918 obtuvo una importante victoria frente a los alemanes en la batalla de Saint Mihiel, seguida por otra en Meuse-Argonne. Al firmarse el armisticio, se encontraba cerca de alcanzar Sedan, objetivo de la ofensiva conjunta.
Por su contribución a la victoria final en la guerra, el Congreso creó específicamente para él el rango de General de los Ejércitos de Estados Unidos. En 1921 fue nombrado jefe del Estado Mayor del Ejército, cargo desde el que emprendió la reestructuración en una sola de las distintas fuerzas armadas de la nación (Ejército Regular, Guardia Nacional y Reserva Permanente). En 1924 se retiró del servicio activo, pese a lo cual encabezó una comisión para supervisar los Monumentos a los Caídos en Francia, y siguió ligado al estamento militar como asesor extraoficial. En 1931 publicó My experiences in the world war, obra que obtuvo el Premio Pulitzer.