Pacheco de la Espriella, Abel (1933-VVVV).


Político y médico costarricense nacido en Limón el 22 de diciembre de 1933. Ejerció como psiquiatra y comentarista de televisión antes de ingresar en política en 1994 y presentar, ocho años después, su candidatura a la presidencia de la República. Al término de su gestión en 2006, cedió el mando presidencial a Óscar Arias.

Criado por su madre y sus abuelos paternos tras la separación de sus padres, la familia trasladó su residencia a San José, donde el pequeño Abel cursó sus estudios primarios en la escuela Buenaventura Corrales y en el colegio de Los Ángeles. Después logró becas universitarias para realizar su licenciatura en Medicina en la Universidad Nacional Autónoma de México y, a continuación, la especialidad en Psiquiatría en Luisiana (EE.UU.).

De fuertes convicciones ideológicas desde su juventud, durante su estancia como estudiante en México participó en la intentona golpista contra el gobierno costarricense de José Figueres, conocida como «invasión del 55». El movimiento, liderado por Rafael Calderón Guardia, se fraguó en Nicaragua, donde se planeó la fallida incursión en el país por Quesada. En 1959, Pacheco regresó a Costa Rica y se empleó como médico en Guápiles y Puriscal antes de trasladarse a los Estados Unidos para especializarse como psiquiatra. De nuevo en su país natal, entre 1962 y 1978 trabajó en el hospital psiquiátrico Manuel Antonio Chapuí, centro del que fue director los últimos dieciocho años y que se convirtió, bajo su gestión, en el Hospital Psiquiátrico Nacional. En 1978 surgieron diferencias entre los administradores y la dirección del hospital y Pacheco presentó su renuncia al cargo. Su trayectoria profesional dio entonces un giro radical.

El mismo día que abandonaba el Psiquiátrico Nacional, el Canal 6 de la televisión de Costa Rica le contrató como director del departamento cultural de la cadena y, durante más de veinte años, se mantuvo en antena como responsable de programas como Un instante de poesía, Ayer y hoy en la historia o Leyendas y tradiciones nacionales y como comentarista televisivo en el espacio Comentarios con el doctor Abel Pacheco.

Poco antes de las elecciones presidenciales de febrero de 1994, retomó las inquietudes políticas de su juventud y, de la mano del candidato del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC) Miguel Ángel Rodríguez, se colocó en la primera línea de la vida pública costarricense. Rodríguez perdió la batalla electoral en favor de José María Figueres del PLN y Pacheco fue elegido ese mismo año presidente del PUSC, cargó que ocupó hasta 1988. En los nuevos comicios presidenciales y legislativos, celebrados el 1 de febrero de 1988, Rodríguez logró imponerse al candidato gubernamental José Miguel Corrales y fue proclamado nuevo presidente de la República. Entretanto, Pacheco conseguía un escaño parlamentario por la circunscripción de San José.

Pocos meses antes de finalizar el mandato de Rodríguez, el PUSC celebró elecciones internas para designar al nuevo candidato a las elecciones de febrero de 2002 y Pacheco resultó elegido por abrumadora mayoría, frente a su correligionario Rodolfo Méndez. Enfrentado en la carrera electoral a Rolando Araya, candidato del Partido de Liberación Nacional (PLN), las encuestas hacían prever una ajustada victoria de Pacheco aunque, por primera vez en la historia reciente del país, la aparición del Partido de Acción Ciudadana (PAC) en la lucha por la presidencia rompía el bipartidismo tradicional del sistema político costarricense y complicaba la consecución de mayorías parlamentarias en la primera vuelta. Los pronósticos se cumplieron y en los comicios celebrados el 2 de febrero de 2002 ninguno de los candidatos logró el 40% de los votos necesarios para lograr el triunfo. El 7 de abril, Pacheco y Araya se enfrentaron nuevamente en la segunda vuelta electoral y, como anunciaban los sondeos, el candidato conservador y líder del PUSC consiguió el triunfo en unos comicios caracterizados por la apatía del electorado.

El modelo neoliberal desarrollado durante su mandato encontró contestación en los sectores de la energía, las telecomunicaciones y la enseñanza, que respondieron con sonoras huelgas contra los planes gubernamentales. En 2004, el país suscribió con Estados Unidos su vinculación al Tratado de Libre Comercio con Centroamérica. Aquel mismo año, algunos escándalos de corrupción que salpicaron a las altas esferas políticas sacudieron los cimientos de las instituciones y contribuyeron a incrementar la pérdida de confianza del electorado en su clase dirigente. Así las cosas, la alta abstención amenazaba con convertirse de nuevo en la gran protagonista de las presidenciales de 2006. Celebrados los comicios, volvió a imponerse la alternancia entre los grandes partidos tradicionales y el ex presidente Óscar Arias, candidato del PLN, logró el triunfo para asumir de nuevo la jefatura del Estado costarricense.