Fabián, Papa y Santo (¿-250).
Papa y mártir. Sucedió a San Antero. Muerto el papa Antero, asistió a la elección movido por el deseo de saber sobre quien recaería la elección, cuando una paloma vino a posarse sobre su cabeza, lo que movió a todos a proclamarlo por unanimidad. Era seglar en el momento de su designación como obispo de la Iglesia de Roma el año 236. Su pontificado fue dificultoso al principio durante el imperio de Gordiano III, pero se volvió fácil y fructuoso para la iglesia durante el de Filipo I (244-249) y el de Filipo II (247-249), asociado al Imperio. En el intervalo de paz durante el imperio de Filipo el Árabe, el papa Fabián organizó la vida social de la Iglesia, distribuyendo Roma en siete regiones, cada una con su diácono al frente. El prestigio de Fabián era inmenso. Recibió martirio el 20 de enero del año 250, al comienzo de la persecución de Decio, como atestigua san Cipriano. Fue sepultado en las catacumbas de Calixto, en donde se encontró el cadáver el año 1915. Debido a la violencia de las persecuciones, después de su muerte, la sede papal quedó vacante durante dieciocho meses. Su sucesor fue San Cornelio.