Díaz Porlier, Juan (1775-1815).


General español, llamado el Marquesito, nacido en La Habana en 1788 y muerto en La Coruña en 1815. Hijo natural, guardó siempre mucho misterio sobre sus orígenes. Se le llamó El Marquesito por creérsele sobrino del marqués de la Romana. Marino, combatió en Trafalgar, y luego fue guerrillero en la Guerra de la Independencia. Sufrió una derrota en Gamonal en 1808. Ascendido a Coronel, el 24 de marzo de 1809 firmó en Burón (León) un parte, publicado en Cádiz, que dirigía a Baltasar de Cienfuegos y Jovellanos, sobre los incidentes habidos en el ataque de Cervera de Pisuerga (Palencia). En 1810 se calcula que actuó en la Rioja con 500 caballos y 3.000 infantes. Operaba entre Asturias, Valladolid y Bilbao. Una carta suya, sin fecha, a los generales y tropas francesas en España, se publicó en Diario Mercantil de Cádiz (16 diciembre de 1810). En ella comunica que por tres soldados españoles arcabuceados por los franceses, él va a ahorcar a seis, y promete aplicar rigurosamente la ley del Talión. La respuesta del general Carrier, desde Palencia, también publicada, lleva fecha del 16 de octubre 1810. Su parte sobre la lucha en Santander, (Renedo, 21 agosto de 1811), se publicó en la segunda Gaceta extraordinaria de la Coruña (2 de septiembre), y fue reproducido por Conciso (18 de septiembre de 1811). Nombrado General, se halló en las batallas de San Marcial y Vitoria. Costeó la edición del Discurso sobre la Constitución española de Juan Antonio Posse (Oviedo, 1813), para ilustración de las provincias en las que había hecho la guerra. Mariscal de campo en 1814, se casó con Josefa Queipo de Llano, hija de los condes de Toreno. En 1814 se hallaba preso por liberal en el castillo de San Antón, de la Coruña, pero salió con permiso para tomar los baños, y así pudo urdir la conspiración que le llevó a pronunciarse en septiembre 1815 para proclamar de nuevo en España la Constitución de 1812. Fue elegido presidente de la Junta de Galicia, detuvo al general Saint-March, y preparó la marcha sobre Santiago. Vencido, fue sometido a consejo de guerra, integrado por los mariscales de campo Ulises Albergoti, Rafael Martinengo, Alejandro Ojea y José García Paredes, los brigadieres Carlos Leamur, Juan de Ara, marqués de Almeira, José de la Fuente y Salvador Escandón. Asesor fue el auditor de guerra Manuel Losada Cardoniga. Condenado a muerte, otorgó testamento en La Coruña, 2 octubre de 1815, en el que encargaba a José Miranda que entregase la llave de su caja mortuoria, y una copia del testamento, a su mujer. Al día siguiente fue ahorcado. Su nombre se convirtió en uno de los primeros del martirologio liberal, de profundo arraigo popular. Benito Pérez, en la «Advertencia» al Romancero de Riego, cuenta haber presenciado en Candas el 14 septiembre 1819 la gran danza circular, o prima, en la que quinientos mozos y mozas cantaban el romance triste a la muerte de Porlier, obra al parecer del escribano Ramón Miranda. El arcediano de Gerona Pedro García Diego negó en 1820 haber sido él el delator.

Bibliografía

  • RIAÑO, Camilo: El teniente General Don Antonio Nariño. Bogotá: 1973.