Behring, Vito (1680-1741).


Explorador danés, que fue oficial de la marina rusa, nacido en Horsens en 1680 y fallecido en la isla de Bering, cerca de la península de Kamchatka, el 19 de diciembre de 1741.

El zar Pedro I el Grande, en su intento de modernizar y occidentalizar Rusia, realizó una serie de cambios y reformas en su reino. Una de ellas fue la creación de una marina de guerra, para lo cual contrató a marinos de diversas nacionalidades que participaron en las expediciones geográficas realizadas en el siglo XVIII, entre los cuales se hallaba Vito Behering.

Expediciones

Tras un viaje a las Indias orientales, Bering se alistó como voluntario dentro de la marina imperial rusa. En 1724, ya con el grado de subteniente, el Zar Pedro el Grande le encargó explorar las costas de la península de Kamchatka; cuatro años después descubrió la isla, el mar y el estrecho a que llevan su nombre. En 1733 comenzó el segundo de sus viajes por las costas del noreste de Siberia. El tercero le llevó a las costas americanas; no volvió de éste, pues murió durante el regreso.

Primera expedición

El objetivo de esta primera expedición era explorar las derrotas de Siberia, es decir, las vías marítimas entre Rusia y Norteamérica. Unos años antes, en 1648, Semyon Dezhnyov había realizado una expedición durante la cual navegó por el estrecho de Bering, aunque las noticias acerca de ésta no se conocieron hasta 1736.

Sea como fuere, el caso es que Bering preparó su expedición, se abasteció de víveres y accesorios, y zarpó de la península de Kamchatka el día 13 de julio de 1728. Cruzó el estrecho al que posteriormente se llamaría de Bering, y en el mes de agosto penetró en el océano Ártico. Debido a las condiciones meteorológicas, muy adversas, no pudo avistar las costas del continente americano, objetivo final del viaje; lo que sí pudo comprobar y demostrar es que los continentes asiático y americano no estaban unidos: eran claramente continentes independientes. Finalmente, en 1730 regresó a San Petesburgo, la nueva capital creada por Pedro I.

Segunda expedición

Desde que llegó a San Petersburgo, Bering se dedicó a preparar otro viaje, esta vez por las costas del noreste de Siberia, con el fin de levantar la cartografía de las mismas, proyecto que se incluía dentro de un gran programa ruso, cuyo objetivo era finalizar la exploración de toda la costa siberiana y levantar los mapas de ésta entre los años 1733 y 1743. Esta segunda expedición, comenzó en el año previsto, ya bajo el reinado de la zarina Ana. Bering estuvo al mando de una empresa mucho más importante y ambiciosa: la elaboración de los mapas de extensas áreas de la costa del nordeste de Siberia, labor que cumplió sin mayores contratiempos, tras lo cual regresó a puerto.

Tercera expedición

El 4 de junio de 1741, Bering se puso en marcha para un nuevo viaje exploratorio, cuyo objetivo era reconocer la costa americana del Pacífico. Zarpó del puerto de Petropavl, fundado por él un año antes, junto con Alexei Chirikov, a bordo de barcos separados: Bering a bordo del barco San Pedro y Chirikov al mando del San Pablo. Una tormenta separó ambas embarcaciones y Chirikov descubrió por su cuenta varias islas del archipiélago de las Aleutianas, tras lo cual puso rumbo al continente americano, concretamente a las costas de Alaska. Allí, Bering avistó el 29 de julio de ese año 1741 lo que hoy se conoce como cabo de San Elías, al norte del continente americano, y poco después desembarcó en la isla de Kayak. Durante el retorno a Rusia, Bering y la mayoría de los miembros de la tripulación padecieron escorbuto. Por si fuera poco, las malas condiciones de visibilidad, debidas a las tormentas y la niebla hicieron que el barco naufragara el mes de noviembre en una isla deshabitada (la actual Bering). El explorador falleció un mes después, pues su frágil estado de salud no le permitió soportar las condiciones adversas de la vida en la isla. Unos cuantos supervivientes construyeron una balsa y consiguieron regresar a Kamchatka en 1742; consigo llevaban noticias sobre el desastre, pero también sobre las magníficas posibilidades del comercio de pieles en las islas Aleutianas y Alaska.

Consecuencias de sus viajes

Las expediciones de Vito Bering dieron a conocer una amplia porción de las costas euroasiáticas, las siberianas, hasta entonces desconocidas, a la vez que certificaron la separación de los continentes asiático y americano. No obstante, esto no impidió que se pusiesen las bases para la expansión colonial terrestre rusa en el continente americano, expansión que se verifica en la posesión rusa de Alaska hasta que fue vendida a los Estados Unidos de América.

MFD